QUE RICA ESTA LA ENSAIMADA DESPUES DE TRAILEAR

Después de 4 horitas de coche hasta Alicante, Iván, Inma y mi "hermanillo chico", o sea, yo, ja ja, nos encontramos con el "Comando Aceituno": Miguel, Encarni, Blanca y Edu, Salva, Paco. Habíamos elegido esta combinación por el bajo coste del vuelo, pero lo malo era, que llegaríamos entre unas cosas y otras al hotel, en el Puerto de Soller, Mallorca, a las 0:00, ufff!. Tuvimos que comer de lo que llevábamos preparao antes de embarcar, para que cuando llegáramos al hotel nos metiéramos en el "sobre" con la digestión ya hecha.

No tuve buen sueño. No sé si fue el conducir, el avión, o el viaje tan rápido, la cosa es que apena pegué ojo, estaba muy activado. Tampoco eran los nervios, no estaba presionado, tenía ganas de correr, tenía buenas sensaciones. Sería el "subconciente", pues la conciencia la tengo tranquila, aunque cuando me salga un trabajo, estaré mejor.

Un buen desayuno, con sus bromas incluidas, nos hizo abrir la boca de par en par, pues ya veíamos lo que nos rodeaba. Una Sierra que arañaba el azul de nuestras cabezas. Lo escarpado de sus laderas y el cuenco que formaba sus formaciones calizas, me daba la sensación de estar dentro de un volcán inactivo, pero que a las 9:00, explotó y soltó en estampida a los corremontañeros.

Un zona desconocida, pero la gráfica del recorrido la tenía en mi cabeza. No podimos ir el día anterior a la charla técnica.

Invadimos las calles de Biniaraix, la salida. La comarca dormía, pero en las calles la algarabía de corredores calentando rompía el silencio del domingo. Tras el homenaje a Tolo, fallecido recientemente en el Annapuerna, levantaban la cinta y se desbocaban las pezuñas de tantos y tantas venidos de aquí y del otro lado del Mediterráneo. Fueron unos metros de asfalto y en un chasquido......., al polvo. Subimos por el encañonado Barranco de Biniaraix hasta Es Cornador, 6km de constante subida con 900 m. de D+. Chamorro y yo vamos progresando, arañando el adoquinado de esta senda en zig-zag, una joya de subida. Cruzamos el agua que baja de la sierra, rodeados de paredes con chorreras calizas de cientos de años. Subimos a la sombra, la temperatura y el día es perfecto. Mi ritmo me gusta, mis sensaciones también, llevo las piernas sin carga y me noto..... dinámico, con chispa. Ojalá no se hubiera terminado la subida.

Noto que Chamorro se queda un poco. En una zeta que hace la senda, lo aliento, veo que va bien pero que prefiere hacer su carrera.

Viene el primer tramo de bajada técnica, y en verdad, todas las bajadas eran muy técnicas. Tramos donde no había senda, ibas saltando de roca en roca y viendo las cuchillas que formaban los filos de la caliza, había que afinar. En un tramo de senda, en bajada, en la que se le podía dar a las patas, los arbustos de largas hojas, que allí crecen, cubrían la senda. Te daban la opción de pensar: -¿ocultará una roca trampa?-. Iba con las rodillas levantadas. Pensaba: -¿por qué no pasa por aquí el poda el césped?-. Y por esta zona salí "catapultado" hacia unos arbusto de pinchos, y me arrastré de lo lindo para salir. Las piernas como un Cristo.

Vino otra subida. Otro pepinillo picante, el Puig de L´Ofre. Guapísimo el tramo de bosque, y la senda que lo atraviesa. Buenas sensaciones, me lo estaba pasando en grande yo sólo, oleeeeee!. Escucho pitidos, uno, dos , tres. Es la manta del chip, un punto de control intermedio, y cada vez que pasas pita. Se los compis que llevo delante. Viene un tramo de echarse en las rodillas, de pateo, imposible correr. Me permito entre palanca y palanca mirar, se ve el Mar. Hago cumbre y pa abajo con los ánimos de tantos que allí habían.

Creo que esta ha sido la carrera en la que menos he podido mirar los alrededores. Las bajadas eran muy técnicas, no daban cuartel: -¡No querías montaña!, ¡pues toma montaña!.

Los sentidos al 100% para no dar con los huesos en la caliza. A donde cayeras, te podías hacer polvo. Alguna torcedura leve, pero típico.

En la Portell de sa Costa, km16. Llegue con buenas sensaciones, veía el valle, la meta allí abajo, pero la bajada no admitía titubeos, ni reojos, había que hablar de tú a tú, hilar fino. Una senda de piedra suelta. Una bajada de 4km sin tregua, con auténticas trampas para los tobillos. Las piernas iban bien pero iba seguro, y es que aunque hubiera querido arriesgar, creo que más rápido no podía ir yo. Hay que decir, que la organización ha estado increíble. Un despliegue de mucho personal por el recorrido, bien señalizado, reforzando los puntos mas peligrosos y avisando de ello, aunque hablaban en mallorquín y no me enteraba de nada. Muy bien los avituallamientos y la recepción en meta, aunque se echo en falta una comida para después de carrera, aunque dieron una comida el sábado pero estábamos de viaje.

Los últimos kilómetros fueron rápidos, sendero y carretera en bajada y con algún tobogán. Tenía piernas y dí zapatilla, arañé un par de puestos. Y con mi "caballito" pasé por meta, el 27º, 2h34´.

Pocos eran los que no lucíamos las marcas del Monte. Señales en nuestras carnes de haber intentado ir rápido por donde casi no se podía. Pero, por suerte fue: chapa y pintura.

En la plaza éramos una fiesta. Estábamos muy contentos con nuestras carreras. Blanca había ganado, 3º Encarni; Iván 8º; los Mudarra a tope y delante, son una referencia; Chamorro contento por su progresión, Inma feliz con sus sensaciones en carrera 11ª, Noelia 8ª y sorprendida con el recorrido; y José María 3º en veteranos; Salva y Lorenzo con una sonrisa de oreja a oreja; Edu (marido de Blanca) y Olga, (esposa de A.Mudarra) con sus dos niñas, nuestros cómplices en estos 23,5km. Nos pusimos a bailar, no somos tan serios o profesionales, pero no lo pasamos bien, somos andaluces y nos entienden.

Seguimos con este día en una pizzeria, compartiendo experiencias, sensaciones, heridas. De postre una ensaimada de Blanca por su victoria en la Sierra de la Tramuntana.

El lunes, no parábamos de dar gracias de que el diluvio que caía no hubiese sido el día anterior. El temporal nos retuvo en el aeropuerto unas horas. Pero, lo que empezo siendo un paseo por el aeropuerto para matar el tiempo, paso a ser un entreno, y es que Blanca y Miguel tienen una chispa, un chispazo, que contagia al que se les pegue.

Próxima salida con imperdibles en el pecho: Animal Trail 50km, el 16 mayo. Aunque es la primera edición tengo mucha ilusión, por la distancia y por entorno: El Burgo, Málaga, en la Sierra de la Nieves, pueblo donde nació mi madre y campos que ando mi abuelo.

Seguiremos con el Campeonato de España, en Sabiñánigo, Puyada a Oturia. 38km que te van absorviendo las fuerzas y te llenas de ellas al llegar a meta. La organización seguro que estará como el año pasado, perfecta, son expertos.

Quiero dar gracias a Peri por su lucha por que la selección marche. Agradecer el apoyo que van a prestar Deportemania, Deportes Sherpa, Transportes Emba-Aras, Federación Andaluza y a Salomon en concreto a José Torres, que se esta desviviendo para que tengamos una equipación de nuestra talla.

video:

http://www.youtube.com/watch?v=wRfA0uQRi3s&feature=player_embedded

http://www.cursademuntanyasoller.net/

MUCHO MONTE