sábado, 19 de febrero de 2011

EL CIRCULAR DE LOS TRES BOSQUES


Un abrazo para Mariquilla y que se recupere pronto.


Cuando se mira al bosque de pinsapos desde el mirador de Ceballos en Yunquera, (Málaga) te das cuenta que el oxígeno que se fabrica en estas sombras es de primera calidad. Que las rampas  que esconden la densa arboleda hace que el aire frío que raje aún más la garganta. Este portal de entrada no tiene comparación para mí. Una reserva de los padres del "pino moderno", los pinos de la antigüedad. El pinsapar se deja domar por las sendas que lo atraviesan. Las raíces se cruzan, los escalones de roca no han sido tallados. Entre ellos queda lo sobrante de la estación pasada, se han quedado helados los bloques de caliza. Su abrigo verde, amarillo, marrón es elegante, colores de moda en los fríos rincones de la Serranía.



Poco a poco, puntera a puntera salimos del bosque. Atrás se quedan las risas de sus seres, y las miradas de estos se vuelve a la explanada de los coches, para ver a los siguientes valientes que se atreveran a caminar por sus sendas.  De aquí se toma la tinta para los cuentos y las leyendas de las gentes de estas Tierras: "Peñón de los Enamorados", "Cañada de las Ánimas", "Cueva del Oso", "Cañada de las Carnicerías", "Cañada del Cuerno", etc.




Pasamos a campo abierto. Estas alturas son duras para sobrevivir. Solo viven los mas fuertes y los que menos necesitan, los quejigos. Arboles  muertos pero muy vivos. Alguna encina ha dejado sus alas desplegadas, insultante permanece en su feudo. Vamos por nieve, se deja pisar y corretear. El romper de este blanco es nuestra banda sonora. Iván me precede, lleva "dos caballos de refresco en la riñonera".



El blanco se mezcla con el gris de la caliza. La Torrecilla se alza como una bola de crema esperando los bocados de los que irán a dar bocados. Prefiero hacer el circular: Ceballos-Puerto Bellina-Puerto Pilones-Cañada del Cuerno-Quejigales-Cañada de las Ánimas ("bosque de fangor")-Nevero-Puerto Bellina-Ceballos. El Circular de los Tres Pinsapares.



La sensación de ir por la nieve correteando y perdiendo el paso continuamente me hace mas libre. Salimos a  los Pilones, un grupo grande se esta haciendo una foto. Bajamos por la Cañada del Cuerno. El bosque nos cubre. El sendero se hiela a tramos. Y en uno doy un resbalón y me doy un costalazo que me deja  la cadera tocada y se me incha. Me molestó bastante durante la ruta, y no me dejó correr hasta el jueves.




Le doy a Iván las llaves de la furgo, y le digo que si quiere ir a otro ritmo, que tire, que ya conocemos el terreno y vamos con móvil.

Llegamos al siguiente punto caliente del circular de la ruta, la Cañada de las Ánimas, el bosque de las maravillas. La primera vez que corrí por aquí no me creía por el lugar que iba. Cada rincón reboza  humedad,  naturaleza. Nos espera una subida mixta, nieve blanda y dura, roca, a veces a cuatro patas y con problemas de tracción, razón de mas para reírnos.



Asomamos al puerto y, trote por nieve hasta el Peñón de los Enamorados. Y nos tomamos unos pocos de kilómetros de nieve en bajada. Iván alargó, y yo a mi ritmo y con mi pata inchadilla. Por aquí se había acumulado bastante nieve. La estampa era espectacular. Los lumbares me dolían y el golpe también. Subía un grupo andando, uno lleva un trineo de esos de plástico, veremos a ver..... .


De un salto pasé del desierto de las alturas al bosque primitivo. Grupos van andando, me cruzo con ellos, con la mirada de:- otro loco de los que corren y quieren llegar antes-.

No es para llegar antes, es otra forma de llegar.





2 comentarios:

  1. Ruta espectacular donde las haya, sí señor. Te recomiendo añadirle otro pinsapar más, el de Cuberos, detrás de Puerto Bellina. Realizar un esfuerzo de más con unos cuantos kilometrillos extra merecerá la pena, estoy seguro. Un saludo!

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  2. ya te digo, uffff que guapo, esa parte me pareció el "Canada",espectacular si señor. un saludo

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