GR10. VALENCIA, BLANCA Y ROJA.
El camino a Valencia se me hizo muy ameno y fugaz, entre charla y charla con Iván y Manolo. Para Iván iba a ser su estreno en la larga distancia y yo llevaba dos años sin hacer más de 4h30´. Manolo, aprovechaba nuestro viaje para visitar a su novia Mónica (pues es de Valencia capital).
El fuerte viento nos acompañó hasta Valencia, llegando a arreciar y zarandear la
furgo. En la parada para almorzar, tuvimos que andar con cuidado para que la tortilla no saliera como un platillo volante. Vaya ventolera.
Teníamos pensado,
Iván y yo, dormir estos días en la
furgo, pero Mónica y su madre insistían en que nos hospedáramos, nos encontramos como en casa, muchas gracias.
Valencia, es una ciudad muy amplia, de anchas avenidas, con muchos kilómetros de carriles
bici y zonas de aceras anchas que invitan al corretear a los
urbanitas. El cauce del río
Turia fue
bovedado y ha sido aprovechado ese espacio como parque, paseo y zonas deportivas, un lujo para los aficionados al
running,etc.
Recorrido GR10 Manolo y Mónica, una gran apoyo
Manolo y Mónica, se ofrecieron a hacernos la asistencia en carrera y recogernos en la meta. Fue una sorpresa para mí y un lujo inesperado para nosotros, por lo que preferí salir sin mochila y menos comida. Los pequeños bocadillos(medios
sandwichs de dátiles, jamón y salmón,un buen aporte de energía) me lo iban a ir pasando en los controles, al igual que las bebidas de
proteínas y los cambios de botellín. Cambié la mochila (que había domado en los
entrenos previos y tan bien me había ido) por la
riñonera Salomon (práctica y fácil de coger), sumándole un par de bolsos para
barritas, geles y demás material obligatorio. Mi traje de faena iba a ser: zapas
Salomon S-
Lab 2
XT Wings (suspensión, cómodas, técnicas y de ajuste rápido), malla 3/4
Salomon Trail II (flexibles y muy transpirables)
http://www.salomonrunning.com/SP/clothing/clothing/pants/trail-ii-3-4-tight-m.html, camiseta manga larga
Salomon Trail Runner Warm LS Tech Tee M
http://www.salomonrunning.com/SP/clothing/clothing/tees-shirts/trail-runner-warm-ls-tech-tee-m.htmlgorra y
riñonera de un botellín
suplementada por un bolso al cinto y una funda de cámara de fotos(para barritas) y una bolsa de rejilla donde llevaba el chubasquero
Salomon Fast II
http://www.salomonrunning.com/SP/clothing/clothing/jackets/fast-ii-jacket-m.html (ligero, flexible y suficiente para este día).
Tras una cena bien cargada de pasta y fruta, nos fuimos a la cama a las 21:00, leer sobre César e intentar dormir unas 6 horas, pues a las 4 tocaba el despertador. Pero una vecina que se recogía de su noche de marcha, nos trunco el sueño con sus tacones.
Con un desayuno completo: cereales, tostadas, café, pastel, etc, nos fuimos espabilando bien y nos fuimos a Puçol. En el pabellón de deportes marchaba la cosa. Movimiento de personal, mochilas, bastones, revisión de material, dorsal. Saludo a Miquel Giménez, organizador, apasionado y practicante del trail, a Adolf Aguiló, amante y especialista de ultrafondo y Juan A. Rúiz, gran corredor, enganchado a ir al monte y "padre de la criatura", el año pasado se le ocurrió y logró hacer lo que este año es la primera edición.
Nos hacemos una foto todos los que vamos a tomar salida y sin mas, la organización inicia la salida. A mí, y creo que a casi todos, nos pilla la salida por sorpresa. Le doy la chaqueta a Manolo, y salgo pitando. En los primeros metros iba con el brazo izquierdo al aire, como un cetrero recibiendo a su halcón, para que el gps cogiera cobertura.
En mi progresión por alcanzar la cabeza, saludo a Ángel Balsera, otro andaluz, de Granada, que se ha venido al Levante, a conocer unas de sus Serranías. También intercambio ánimos y buenas zancadas con Samuel y Lidia, dos compis de ultras y pareja inagotable en el ultrafondo, competían como pareja mixta, ganarían esta categoría y Lidia en clasificación femenina además.
Creo alcanzar a las primeras luces que
parpadean, no reconozco a estos corredores, pero a poco llegamos a Juan A.
Ruiz "
Juanan". No veo a
Aguiló, ni a
Iván. Y pienso: por donde andará el
Cañaman (
Iván), ya ha
dao el zapatazo y se ha soltado el pelo, ¿suerte compañero!-. Reservo mi ansia y me freno, me quedo con un
grupete en el que va
Juanan, buen lazarillo para un ciego como yo en esta Sierra desconocida en esta madrugada oscura. El ritmo que va marcando es bueno para este principio, pues ir más rápido ya sería ir a ritmos de
maratón y esto tiene 93km. Vamos recorriendo las primeras sendas, pistas. Los frontales alumbran las marcas
Gr, rojo y blanco, que colores tan familiares y amigos en este sábado. Pero yo sólo sigo la zancada de
Juanan, parece un sabueso en su terreno, un zorro que casa en la oscuridad y cada pata la pone donde ya sabe. Entre paso y paso, levantó la cabeza, miro a mi alrededor, domino la ciudad de Valencia y algunos pueblos del interior, a lo lejos el cielo y el mar se funden en un negro silencio, entre los senderos,
crugen nuestros pasos y suenan la obligada de nuestras pertenencias.
Marca GREscuchamos voces, y al apuntar con nuestro cíclope luminoso, vemos a los voluntarios que nos animan a subir por una zona de trepada fácil, un toque de "
verticalidad" al ultra. Cuando pasamos por l primer punto de
avituallamiento,
Segart (km 14,2) me doy cuenta que vamos 50´ por encima del tiempo más rápido que esperaba la
organización, Manolo me anima, le pregunto por
Iván: -
Iván va como una moto, os lleva 7´-., buena información, pero le comento que se ha arriesgado mucho, puede perderse. Hasta aquí mis sensaciones son muy buenas, voy ojeando mis niveles, mis indicadores, mis sensaciones, son muy buenas, economizo mucho, cada zancada,cada gesto, ahorro. Donde mis compañeros de ruta trotan cuesta arriba, yo alterno pateo largo y corto, con braceo amplio o
hechado en las rodillas: economía de carrera. A la hora doy bocados a
barritas de hidratos y
proteinas, y
sorbitos al isotónico.
Mi perfil "tuneado", mi chuleta.
Dejando
Segart atrás nos volvemos a adentrar en la espesura, siguiendo una senda escalonada y bien marcada,
zigzageando vamos cogiendo altura, aprovecho los tramos de pateo para coger mi "chuleta", un perfil en miniatura que modificado con anotaciones y junto al
gps, me da la posibilidad de imaginarme lo que me espera, esto me da seguridad.
Tras
Juanan, nos topamos con una zona de bloques
superpuestos, otra zona vertical, un cañón estreño. Hay que echar mano a esta rojiza roca, aparecen voluntarios en sus zonas mas cómodas, como si fueran aves en su nido. Siguiendo las marcas
GR voy esquivando las pozas que se han formado con estas lluvias, pequeñas piscinas.
Juanan, se nos ha ido un poco, pero a poco volvemos a juntarnos. Ya me doy cuenta, que el también va haciendo su carrera y su día, reservando y no busca poner un ritmo para descolgarnos, es su ritmo y su aire lo que se distancia de nosotros.
Ya hace un buen rato que ha clareado este sábado, el frontal pasa al rincón de bolsillo de mi cinto, mi idea es no volver a sacarlo, hasta el día siguiente para leer alguna novela épica.
En los siguiente 9
kms, hasta la localidad de
Serra, vamos por senda con desnivel acumulado de 790m. . Nos lleva a lo alto del
vallecito de
Serra, y me voy dejando de llevar en su bajada con tramos de escalones y bonitos recortes en el bosque, y vamos cayendo a la carretera. Allí esta el siguiente
avituallamiento,
Serra (km 23). Ni me paro, Manolo me cambia el botellín sin
pararme, me da referencias
y
Juanan, que iba unos metros delante estaba terminando de cargar su cinto. Partimos los cuatro.
Juanan nos dice que esa zona que viene ahora es muy bonita, y así lo es, unos tramos de barranco seco, de saltos de bloques de piedra (como en el
Trail de
Calderona,
Serra, este pasado mes de octubre, campeonato de España de Clubes). Miro mi chuleta y me chivatea que viene una subida de palanca, a regular, pateo rápido y económico. Asomamos a una pista a 800m. de altitud seguimos unos cientos de metros por llano. El día parece que va a ser, como esperábamos, gris pero de nubes altas,
frio pero con un poco de viento que sirve para regular mejor nuestra temperatura. La pista empieza a picar para arriba, vamos algo separados, pero para mantener una intimidad relativa. En un tramo de senda que exige patear, me pongo música, empiezan los
Iron Maiden con el Virtual
XI, voy escuchando temas y me acuerdo de amigos que coinciden con estos gustos,
Urba,
Feu.... .
Seguimos una pista que va cogiendo cuesta arriba, por aquí parece que el ritmo me cambia, o es que les cambia los demás. Ibamos unos metros separados, Juanan, yo y un xaval que no conozco. Paso a Juanan, le animo y me voy. La rampas se empinan. Me salgo de mi cuerpo y me ojeo desde fuera, analizo mis sensaciones, miro mis niveles en mi cuadro de mandos, todo va muy bien. Me arriesgo y tiro. Confiado en el buen marcaje hasta aquí del recorrido, en el día de nubes altas y claras vistas, en el disfrute de la soledad del corredor de ultrafondo. Todo lo tengo, todo lo llevo encima, todo lo que necesito lo tengo bien colocado en mi cinto. Los temas de los Maiden, van pasando, me los conozco de memoria, cada tema tiene un toque especial, un no sé que.... . Un vehículo de la organizaón me pasa, va cargado de mochilas, un saludo cervical y un gesto de mi garra derecha. Trote y trote, el carril se empina y vuelve a descansar, una curva muy amplia en el terreno me pasa al otro lado de la vaguada, Juanan viene a un par de minutos y el otro corredor no lo veo. No le doy mas importancia de la que tiene, queda mucho, no conozco nada y voy disfrutando mucho en mi nave, controlando cada sensor de mi cuerpo. Ya voy casi por el km 30. Vuelvo a sacar mi chuleta e imagino mi próxima incursión en este terreno.
Esquivando charcos que ocupan casi toda la pista, no escatimo en
zacandas, mas vale seis pasos que tres y mojarme los pies, mas vale bordear que saltar gastar mas fuerzas o fallar, simple economía. Sigo solo a mi aire, me cruzo con unos ciclistas muy abrigados. El carril se abre camino en una Sierra de vaguadas, barrancos, bien poblados de pino
reforestdo, retorcidas encinas y un manto de monte bajo, una alfombra que recorre todo lo que alcanza mi vista.
Gatova,km 44, avituallamiento y control material, ¡vaya mosqueo!
Llego a un cruce, en él hay un voluntario y el vehículo que me había pasado antes. Este corta el paso y me obliga e informa a atacar una pista con mucha cuesta: -todo recto por la pista, todo recto-. Confiado ataco este tramo, mordisqueo mi
barrita de avena y la de
proteinas,
sorbito a mi "botijo triangular" y a hacer "zumo" con mis patas por esta pista empinada. Mi cuerpo ánima al trote y mi mente hace sus "logaritmos" para supervisar mi estado, todo bien, ¡
pa alante!. Llego al final de la cuesta, la pista descansa unos metros, pero tengo un cruce a izquierda, hay un todo terreno y una vieja furgoneta que parece abandonada. No hay marca alguna, nada. Pues sigo la regla: si no hay marcas, sigue recto. La pista sigue bajando, pierdo la
concentración algo no va bien ,esto no es normal, curva tras curva, no veo marcas. Me saco el mapa de la
organización, veo que había que ir por un sendero
PR: -¿un
Pr.........?, pero si el recorrido es por un
GR, ¿a que viene este cambio? ¿por qué no lo han dicho?, claro como no ha habido charla técnica,previa a la salida, bueno y que salida, mariquita el último, no medio tiempo ni a arrancar el
gps......-. Total, me doy la vuelta y llego al cruce, y tiro por el otro camino, un sendero que va por un bancal, que al final se acaba y vuelta otra vez al cruce. Voy sacando los
dientos y resoplando, me asomo a ver si veo a alguien que suba por la pista anterior, nadie. Cuando llego al cruce, veo a unos
senderistas que bajan la pista que yo antes subí, les grito, les pregunto. Me dicen a gritas y de lejos que siga la pista. Me creo que al final era por donde iba en un principio. Abro mis alerones y pongo el modo ataque. Llego a un cruce con marcas de tiza y unas marcas de
cartulina de la
organización, este parece ser el
PR, que raro, -pero que leches ha pasado-, me vengo muy abajo- no se como voy, me derrumbo, me muevo por no pararme y voy y veo un cartel que poner km30, -pero que kilómetro 30, si este es el 40-,
después me entero que es un error, es el 40. En fin, sigo trotando con algo de bajón, pero el sendero va por una zona muy
xula, sube y baja hasta llegar a una torre vigía muy bien restaurada y sigo bajando hasta
Gátova (km44).
Avituallamiento, ánimos, control de material y me desahogo un poco de la pérdida, Manolo y Mónica, me animan me dicen que toda la cabeza de carrera se ha perdido, pero vaya
putada y clara prueba, que los 2 minutos que llevaba de ventaja a
Juanan, se han convertido en 25 minutos de ventaja de él sobre mí. De ir 3º paso a 5º. En fin, hay que despegar y
salir de
Gatova pitando, Manolo me insta a recuperar, pero
quea mucha carrera para ponerse a corretear a tope e ir
estresado teniendo tanta diferencia, y mis piernas van pesadas y mis
isquios algo encogidos, sigo haciendo mi carrera y escucho a Marea, me acuerdo de unos días de escalada con mi amigo
Feu por la Sierra de
Cádiz.
Un saludo al voluntario, sin ellos no sería posible.Sigo por 20 km de soledad agradecida en un
altiplano árido, adornado por pinos, jara, tomillo, por ruinas de cortijos. Los neveros de temporales previos matizan la estampa que veo, que se mezcla con las piedra decoradas por el rojo y blanco del
GR. Voy arañando kilómetros, me tomo una aspirina para ayudar al mitigar el cansancio de mis piernas y lumbares. Algo de viento me transpira y dan un son nuevo al ruido de mi rozamiento en estos caminos. Me quedo sin líquido pero no me alarmo. Me queda poco para
MontMayor (km 62), cruce de carretera . Llego a este tras un tramo de senda cerrada y boscosa. Me sorprende Manolo antes del
avituallamiento, me esta esperando. Voy muy bien y animado. Le pregunto por
Iván: -va ahora segundo, le duelen las rodillas, ha pasado una pájara-, me conexión mental con él es automática, irá luchando con sus fantasmas. Me pongo hasta arriba de bebida y comida, relleno bien, prefiero
hechar 6minutos y cargar bien mi cuerpo de lo que creo que me hace falta, más leña para la locomotora.
Hasta Sacañet (km 78) voy muy seguro y concentrado, disfrutando del terreno y muy pendiente de las marcas, quitando la mala señalización del 30 todo siguió bien. Sigo conectado con Iván, es su primer ultra, su primer bajón, desconocido hasta ahora para él, sé que sabrá responder bien aunque haya perdido el primer puesto, pero ante un especialista como es Aguilo, gra regulador. La ventaja de los que me preceden continúa siendo de 25´, de vez en cuando una mueca domina mi cara, pero bueno, a moverse y a hacerlo bonito.
Llevo bastante kilómetros sin "
retrovisores", miro hacia adelante
, como un explorador en Tierras
desconocidas. Fotografío
metalmente cada detalle y matiz del terreno, juego con mi chuleta a imaginarme lo que me espera. Me visitan y se apoyan en mi hombro los ánimos de mis amigos
Feu,
Urba,
Méndez, Elías, Mark, Peri; mis hermanas
Elvi y
Merce, mi madre, y tantos otros, alguna lágrima se me fuga. Mi físico va al 100%, mi mente al 200%. El sendero me introduce por zonas de bosque
mediterraneo, como una jineta que busca su cubil. Subo y bajo, bajo y subo. Los neveros que me voy encontrando sirven de suspensión a mi paso y la huellas de los que me preceden facilitan mi paso por ellos. Tras pasar, paro unos segundos y me quito la nieve de la lengüeta, mas vale unos segundos, que pies mojados.
Sigo con un
requemor y dolor a la presión por alguna piedra en la planta del pie izquierdo, sé q
ue es una ampolla, pero su dolor es soportable, menos las veces que piso alguna piedra picuda en esa zona, pero sigo
comiéndole kilómetros al recorrido.
En Sacañet me encuentro una animada zona de avituallamiento y una atención de los voluntarios que se agradece, me invitan a sentarme pero le digo en broma que no me lo puedo permitir, sería una trampa casi mortal: -sí,sí, voy muy bien-, -venga, venga, ya te queda poco, aquí te han dejado algo-, Manolo y Mónica ha seguido hasta el final de carrera para llegar a tiempo pues hay mucha carretera, pero me han dejado un par de vasos de bebida proteínica y mi chuleta que se me había olvidao en Monte Mayor, que lujo de asistencia.
Llegando al Alto de Bellida, 1323m. Concentración.
Aquí vino el punto más alto del recorrido, Alto de Bellida, 1323m. . Al que llegué por un arroyo seco pero con manchas de nieve, sendero abrazado por las encinas y bien abrumado de rocas y escalones naturales, que me llevo rápido a la cumbre, alternando trote y pateo. Unas antenas delataban la cota y sus últimos metros estaban franqueados por neveros que se alternaban en la pista, hasta dar con un voluntario volcado en animarme (llegando a ofrecerme bebida y comida), se ve que iba a pasar noche allí pues tenía una tienda montada.
Bajada y mas bajada, divertida y con vistas al siguiente control, Canales (km82). Allí, unas bromas con los presentes, picoteo y a dar zapas que esto esta casi listo.
-ufff, gracias, pero hay cerveza-
-¡aaaaarre!
Pista y mas pista, hasta salir de ella y trotar por un tramo de senda que se escapa del carril y va recortando por una loma hasta volver a una amplia curva, indicaciones de senderos, del GR, y
por una vaguada ancha para abajo sin perder la economía del ritmo. Cada mirada al gps me anima, 8 km a meta, este tramo es alucinante, va bajando y llaneando entre pozas y caidas de agua y al fondo la "presa", Andilla y se que detrás, abajo, esta la Pobleta, a 1 km, la meta, tengo ganas de llegar y abrazarme a mis amigos. Sigo saboreando cada metro del recorrido y comiendo, pues siento un vacío en el estómago, aunque quede muy poco, no hay que perder las normas, ¡más carbóooooon!.
De Andilla a Pobleta esprimo cada zancada por esa senda que los conecta, escucho la música de meta, llego al arroyo seco que huye del asfalto y me sirve para llegar al arco triunfal, escucho las voces de ánimo y con mi caballo andaluz de doma clásica imaginario, simulo mi paso con él por la meta.
el trio del cajón
Mis sensaciones han sido muy buenas en las 11horas que he necesitado para terminar.Ya hacía dos años que no hacía ultrafondo y sigo pensando que este es mi terreno, el de los arrieros.
Con Iván, el incansable.
Me fundo con Iván, intercambiamos impresiones y sensaciones, y destaco a Mónica y Manolo, por su apoyo, asistencia y por el día que han pasado con nosotros.
Tras una ducha que agradece mis estremidades,algo de mi cuerpo se pone en su sitio, pero claro, el alcayatamiento,jeje, siempre dura unos días, esto es así.
Un globito
¡¡¡MUCHO MONTE!!!
http://www.gr10x.com/